A streetcar named Desire

Al salir del cine, al que fui con un buen amigo, empezamos a comentar la película (que él ya había visto) y dijo algo que se me ha quedado grabado: "Esta es una historia en la que la gente, básicamente, se trata mal". Tan sólo el inmenso cuidado y cariño que le profesa Stella a Blanche es capaz de compensar esa violencia, pero es obvio que nace de la culpabilidad y la compasión - aunque se quieran -.

Una de los aspectos más interesantes de la película es el histórico. En la Nueva Orleans de los años 40-50 la vida era el resultado final de cocinar juntos alcohol, noches de juerga, suciedad, malos gestos, escasos modales... La pasión sustiyendo al amor; la felicidad ebria, a la amistad, y la búsqueda del amor, a las ansias de escapar de la soledad. Todos son grandes y falsos sustitutivos, disfrazados de verdad y bondad, pero sólo es necesario dejar pasar unas secuencias para empezar a ver la naturaleza de los personajes. Son personas rotas y afiladas, que pueden cortar cualquier cosa sólo con acercarse.
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